Niñonazo, el protagonista
Sí, Benavente ya tiene toro, pero no creo que nadie dudara que fuera a ser así. Si aún no sabes quien será el protagonista de la carrera del enmaromado de este año, prevista para el 25 de mayo, aquí te dejo una foto del astado, hecha pública por el Ayuntamiento.
Se trata de Niñonazo, un toro de 655 kilos de peso, de la ganadería albaceteña de Samuel Flores. En la página web del Ayuntamiento de Benavente puedes ver más fotos e información: Toro enmaromado 2016
El alcalde, Luciano Huerga, que se estrenaba este año en el tan criticado (para bien y para mal) discurso del día patronal, ha optado por dar a conocer este astado en el mismo acto de la 
petición del toro, el mismo día de la Veguilla, como ya se hiciera hace años con un anterior equipo de Gobierno socialista.
Habrá un torito, pero no dos. En su lugar, se sacará otro toro el sábado (tendrá que ser un utrero). Su anuncio no consiguió la unanimidad de la plaza, y se oyeron tantos aplausos como pitidos. Y es que tantos ‘complementos’ taurinos acaban desvirtuando la verdadera fiesta, la carrera del toro enmaromado, la del miércoles anterior al día de Corpus.
La petición
Yo este año he vivido la petición del toro desde la plaza, que es desde donde realmente me gusta. Durante años lo he hecho desde los balcones del Ayuntamiento, algo que algunos consideran un privilegio y para otros efectivamente lo es, sobre todo, porque año tras año se ve desfilar de uno a otro balcón a la mujer, el marido, el hijo o el amigo de algún representante o trabajador municipal. No digo yo que este año haya sido así y tampoco lo contrario.
La novedad al entrar en la plaza fue la prohibición de meter los tapones de las botellas, un control al que escaparon muchos jóvenes que se las ingeniaron para pasar desapercibidos. Como pasaron también de la advertencia municipal de que se va a identificar a aquellos que mojaran al resto con la bebida. 
Lo cierto es que para algunos ya es tradición cualquier cosa, como lo de lanzar el vino al aire antes, durante o después de la petición del toro. Pues no, no lo es. Y lo único que se ha conseguido en los últimos tiempos con esta ‘diversión’ es echar hacia los soportales y las entradas a la plaza a aquellos que no quieren bautizarse en vino.
Entre esto y la lluvia, que no se quiso perder la cita, la verdad es que no había tanta aglomeración de gente que en años anteriores en gran parte de la Plaza Mayor.
El discurso del alcalde
A Luciano se le veía notablemente emocionado cuando salió al balcón, (cómo para no estarlo!). Volvieron las alusiones a la tradición, los repetidos ‘vivas’, el ‘toro, toro, toro’ y el agradecimiento a los representantes institucionales y a los benaventanos, los presentes y los ausentes. Y se permitió ser irónico en la concesión del toro: hizo un guiño a Don Pablo, el alcalde de Bienvenido Mister Marshall y aludió a la tan difundida frase de Mariano Rajoy en su última visita a Benavente.
“Como alcalde vuestro que soy y oyendo vuestras peticiones, y siendo los vecinos los que quieren toro, es el alcalde el que quiere que tengan toro los vecinos. Tenéis toro”
Lo cierto es que parte de los vecinos lo considera una falta de respeto, pero yo no lo veo así, a mí me ha gustado.
Aquí os dejo un enlace a un vídeo de la televisión local de este acto: Petición del toro 2016
El equipo de Gobierno vuelve a apostar por la declaración de Interés Turístico Nacional de la fiesta y como en años anteriores asegura que entre todos vamos a conseguirla. En esto hay que hacer un poco de memoria porque las cosas son como son. La solicitud para esta declaración se hizo ya en el año 2008, tras la elaboración de un expediente por parte de Juan Carlos de la Mata y el acuerdo plenario correspondiente. La resolución fue negativa por un incumplimiento claro, la falta de suficientes publicaciones en medios de comunicación nacionales de esta fiesta. El resto sobra. Y en lo del resto se incluyen las manifestaciones de apoyo o la recogida de firmas; en lo que hay que trabajar es en eso, en la difusión mediática de la fiesta a nivel nacional.
Otra cita ineludible
La verdadera protagonista de esta fiesta es la Virgen de la Vega, la Veguilla, la patrona de Benavente que este año se asomó hasta la puerta de la iglesia de Santa María pero no pudo procesionar por el centro urbano
portada por representantes de las peñas oficiales por la lluvia. Sí lo hizo por el interior del templo a hombros de los peñistas de Badenes y siguiendo el desfile de las banderas de las peñas oficiales.
No faltó el reparto del pan de la Veguilla y tampoco la elección de lo que ahora llaman ‘representantes de la juventud y de la infancia’ y que sigue siendo la elección de la Reina y Damas de las fiestas. Ninguna Concejalía de Fiestas ha sido capaz de eliminar esta iniciativa, lo cambiaron de nombre pero sigue siendo lo mismo y creo que ya es hora de que alguien se atreva a dar cerrojo a un acto que se centra en valorar lo guapas o menos guapas que son las jóvenes que lo protagonizan.
Para mejorar
La escasa participación en algunas iniciativas obliga a replantearlas. Algo no ha ido bien. Por un lado, la concentración de sólo cuatro charangas, eso sí más animadas que nunca gracias a la colaboración
de las peñas; por otro, la asistencia de seis autos locos a la carrera de este año, frente a los más de una veintena de ediciones anteriores. Mientras que el desfile de gigantes y cabezudos, recuperado en esta edición, supo a poco. Sólo participó la agrupación local y, aunque fuera lo previsto, el público ha echado de menos a otros grupos de la provincia.
Por lo demás, ha habido música para todos los gustos y no ha faltado el exceso de alcohol en la calle, en contraste con las iniciativas de ocio alternativo. ¿Tú qué cambiarías de estas fiestas? ¿o crees que no hay nada que cambiar?
PONTaldia en Benavente 