Vivir con diabetes

Vivir con diabetes y no para ella es una máxima que aprendí hace tiempo. Aquí dejo una reflexión sobre esta enfermedad en el Día Mundial de la Diabetes

Vivir con la diabetes y no para ella!!

Tengo diabetes desde hace ya casi 32 años y cada día sigo aprendiendo de esta enfermedad con la que me ha tocado vivir. Y no es que sea pesimista frente a la diabetes, pero es que me dia mundial diabetes complicacionesha tocado, porque yo no la pedí.

Hoy me he puesto a escribir sobre la diabetes porque llevo unos días leyendo mensajes sobre esta enfermedad que dejan una sensación muy amarga. Verás, me vas a entender: cada seis segundos se muere una persona por diabetes, es una de las principales causas de ceguera, enfermedad cardiovascular y renal, y de las amputaciones de las extremidades inferiores, la mitad de las personas que tienen diabetes están sin diagnosticar, el 12% del gasto mundial en salud se dedica al diagnóstico y tratamiento de esta enfermedad….

Año tras año, escucho los mismos mensajes, con motivo del Día Mundial de la Diabetes (14 de noviembre) y si algo tengo claro es que sigue existiendo un gran desconocimiento de esta enfermedad que ciertamente amarga la vida a tanta gente.

La diabetes, gran desconocida

Desconocimiento de los propios enfermos, que muchas veces no tienen acceso a una adecuada educación; pero también de muchos de los profesionales que cada día lidian con la diabetes y que lejos de actualizar lo que algún día aprendieron, prefieren seguir anclados en aquello de “prohibido comer esto o aquello”; y, por supuesto, de la administración que (en lugar de plantearse un cambio de modelo sanitario que permita prevenir antes que curar, las complicaciones tan costosas, además de dañinas) lo que hace es ir ahorrando costes eliminando herramientas básicas para el imprescindible tratamiento (esta misma semana una amiga me comentaba que su enfermera ya le había explicado que cada aguja con la que se inyecta la insulina, la puede utilizar dos veces … ¿perdona? ¿todavía estamos así?).

Pero bueno, mi intención no era la de repetir cada uno de estos mensajes que siguen empeorando año tras año sin que nadie les plante cara y sin que las personas con diabetes nos hagamos oír.

Tengo diabetes

Mi intención es la de contarte mi experiencia con esta enfermedad. Yo tengo diabetes tipo 1, o lo que es lo mismo, mi páncreas no segrega insulina, una hormona que permite regular el dia mundial diabetesnivel de glucosa en sangre. Así que como mi páncreas ha decidido no funcionar en condiciones, pues tengo que echarle una mano y la verdad, cuanto mejor conozco mi diabetes, más fácil es la vida con ella.

¿Que cómo es la vida con diabetes? En realidad lo que no sé es cómo es la vida sin ella, porque la diabetes forma parte de mi vida, de cada momento de ella. No es mi compañera de viaje, para mí no, ya lo dije antes, yo no la quiero de compañera.

Desde que me la diagnosticaron hasta hoy en día ha habido muchos cambios tecnológicos que hacen más fácil su tratamiento y el modo de afrontarla ha ido cambiando. Pasando de los mensajes del miedo de hace treinta años, a los de la educación de hoy en día.

La diabetes para mí es pensar, sentir, comer, bailar, sonreír y llorar, planificar, sufrir, amar, experimentar…

Pero hasta llegar aquí he pasado por muchos etapas, las que tienen que ver con la vida misma. Para mí, lo que me permite vivir con la diabetes y no para ella es el conocimiento que tengo de MI diabetes y la actitud ante ella.

Una vida “normal”

Cuando eres una niña y te dicen que tienes diabetes, no sabes realmente lo que significa. Por aquel entonces, lo llevaba mucho peor mi madre que yo. Yo recuerdo del diagnóstico básicamente lo de “tienes que pincharte todos los días para toda la vida”. En el día a día, mi madre fue mi gran apoyo, sobre todo, en una época en la que no era fácil conocer gente con la que compartir tus experiencias.

vivir con diabetesHe tenido etapas de rebeldía, otras de pasotismo, he conocido a gente maravillosa gracias a la diabetes y otra no tanto, me he enfadado con ella (como con la vida), he aprendido y evolucionado, he hecho pasar buenos y malos ratos, muy malos, a los que me rodean, pero siempre he seguido adelante, con ella. Porque un día más con ella, es un día más de vida.

Y si me preguntas si me permite hacer una vida normal, yo te pregunto a ti ¿y qué es lo normal? Esto de la normalidad está sobrevalorado. Si lo que quieres decir es si me pone límites, pues claro, como todo en la vida, pero yo decido cómo afrontarlos. Si no puedo alcanzar un libro ni aún poniéndome de puntillas, yo, o las ganas que tenga, decidimos si acercar un escalón para llegar a él o pasar del libro y optar por uno que esté a mi altura.

No me gusta la diabetes, claro que no, si pudiera decidir si tenerla o no tenerla, pues lo tengo claro, no la quiero ni regalada. Pero lo cierto es que si algo sé desde el principio es que no puedo hacer nada para curarla, de modo que he aprendido a convivir con ella y eso me permite que no sea decisiva a la hora de tomar las decisiones de mi vida (aunque, por supuesto, que la tengo que tener en cuenta).

Y ahora a esperar que pase este Día Mundial de la Diabetes y que de verdad sirva para algo. A mí, de momento, me ha servido para escribir esta nueva entrada, y dar una visión muy personal de la vida con diabetes. Te invito a dejar tus comentarios ,y si te ha gustado, comparte en tus redes sociales!!